Inicia otro año y mucha gente empieza a definir los famosos propósitos, que difícilmente se podrán concretar como pasa cada año; ya que se quedan en eso y no se hace una transición a metas.La pequeña diferencia es que estas últimas si se pueden medir y por ende nuestra mente las procesa con mayor facilidad.
Ahora el concepto de abundancia tiene que ir inherente en cada una de las metas que vayamos a definir; es por ello que una de las características principales al definirlas es que arrojemos la piedra lejos, para exigirnos nosotros mismos salir de nuestra zona de confort, y salir de nuestra zona de confort implica romper paradigmas, y romper paradigmas implica desarrollar una mentalidad de abundancia.
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